Duerme creyendo que, durante la noche, Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente aparcarán los camellos en la calle y entrarán en casa abriendo la puerta con una llave mágica para dejar los regalos.
Sus papas no quieren que cambie nunca la magia de esa noche tan especial, llena de verdadera ilusión y fantasía para él, pero saben que no será así para siempre y llegará el día en el que formulará la gran pregunta ¿los reyes son los padres?
Aunque espera tardar aún unos cuantos años en tener que dar la respuesta, su mamá se va preparando, le gustaría saber cuantos serán pero es imposible de preveerlos. Llegado el momento le explicará la que para ella fue la verdadera historia de los Reyes Magos, que un dia leyó en la red, retocó y guardó a su gusto para la ocasión.
"Cuando el Niño Jesús nació, tres Reyes que venían de Oriente, guiados por una gran estrella, se acercaron al Portal para adorarlo. Le llevaron regalos en prueba de amor y respeto, y el Niño se puso tan contento y parecía tan feliz que el más anciano de los Reyes, Melchor, dijo:
¡Es maravilloso ver tan feliz a un niño! Deberíamos llevar regalos a todos los niños del mundo y ver lo felices que serían.
¡Oh, sí! -exclamó Gaspar-. Es una buena idea, pero eso es muy difícil de hacer, no seremos capaces de poder llevar regalos a todos los niños que hay en el mundo.
Baltasar, el tercero de los Reyes, que estaba escuchando a sus dos compañeros con cara de alegría, comentó: Es verdad que sería fantástico, pero Gaspar tiene razón y, aunque somos magos, ya somos ancianos y nos resultaría muy difícil recorrer el mundo entero entregando regalos a todos los niños. Pero sería tan bonito...
Los tres Reyes se pusieron muy tristes al pensar que no podrían realizar su deseo, y comentaban que necesitarían millones y millones de pajes, como mínimo uno para cada niño, para que pudieran llevar al mismo tiempo a cada casa sus regalos, pero no podían tener tantos pajes, no existen tantos, y los pajes que les gustaría tener deben querer mucho a los niños y conocer muy bien sus deseos, eso es lo que pensaban los tres Reyes, ¿hay alguien que quiera más a los niños y los conozca mejor que sus propios padres o personas que están y piensan en ellos ?
Y decidieron entonces, que en nombre de los tres Reyes de Oriente todos los niños del mundo, para celebrar el día de Reyes, recibieran algún regalo, para conmemorar esos momentos, así que todos los padres u otras personas, se convierten en los Pajes de Sus Majestades, para que en su nombre, y de su parte, regalen a los niños el regalo que deseen y se merezcan.
Decidieron también, que mientras los niños sean pequeños, la entrega de regalos se haga como si la hicieran los propios Reyes Magos. Pero cuando los niños sean suficientemente mayores para entender esto, se les contará esta historia y, a partir de entonces, durante las fiestas de Navidad, los niños harán también regalos a sus seres queridos en prueba de cariño. Y, alrededor del belén, recordarán que, gracias a los tres Reyes Magos todos son más felices."
Ahora tiene 6 años, crecerá y un día comprenderá que todo forma parte de las creencias populares marcadas por las más antiguas tradiciones. Se espera de él, llegado ese día y para todos los siguientes, que siga siendo bueno para que Sus Majestades también lo sean con él y no le tengan que dejar carbón.
Que bonitooo! una historia verdadera y hermosa. Como tu
ResponderEliminarUna historia fantástica. Cargada de magia !!!!
ResponderEliminarQue bonita historia, las lagrimas caen por mi rostro,de lo maravilloso que me ha parecido el relato de los Reyes Magos.
ResponderEliminarLa niña que hay en mi ha vuelto a las mágicas noches de reyes de mi infancia.
que bonito, tomo nota.
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